viernes, 17 de julio de 2009

La Chispa Adecuada


Las palabras fueron avispas y las calles como dunas cuando aun te espero llegar. En un ataúd guardo tu tacto y una corona con tu pelo enmarañado bqueriendo encontrar un arcoiris infinito. Mis manos que aún son de hueso y tu vientre sabe a pan la catedral que es tu cuerpo
Eras verano y mil tormentas y yo el león que sonríe a las paredes que he vuelto a pintar del mismo color.

No sé distinguir entre besos y raíces no sé distinguir lo complicado de lo simple. Y ahora estás en mi lista de promesas a olvidar todo arde si le aplicas la chispa adecuada.

El fuego que era a veces propiola ceniza siempre ajena blanca esperma resbalando por la espina dorsal. Ya somos más viejos y sinceros y que más da si miramos la laguna como llaman ala eternidad de la ausencia.

No sé distinguir entre besos y raíces no sé distinguir lo complicado de lo simple. Y ahora estás en mi lista de promesas a olvidar todo arde si le aplicas la chispa adecuada.

No sé distinguir entre besos y raíces no sé distinguir lo complicado de lo simple. Y ahora estás en mi lista de promesas a olvidar todo arde si le aplicas la chispa adecuada.

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